Dulce de membrillo en pan - GP/PL

Una fruta de mi infancia, que adoro sencillamente.  Recuerdo que lo comia en compota, mermelada, en jalea, y mi favorito, en bloque o "pan".  Podia (y aun puedo!) cenar literalmente dulce de membrillo, ya sea solo, con queso o con pan.  Es una fruta de la que se puede aprovechar hasta la cascara y las semillas, y perfuma la casa con su aroma delicado. Asi que cada otoño, cuando aparece esta fruta, yo aprovecho para preparar todo lo que pueda, modificando, claro está, la receta para que sea apta para el método.  Aquí les dejo mi receta de dulce de membrillo en pan o bloque.

Ingredientes:

1 kilo de membrillos (limpios, ver la receta), 600 gr de fructuosa 

Lavar bien los membrillos y sin pelar, poner en una olla grande, cubrir con agua y llevar a ebullición.  Cuando rompa a hervir, bajar a fuego medio, y hacer hasta que estén blanditos.  Escurrir y cuando ya se puedan manipular sin quemarnos, quitar con cuidado la cascara y el corazón y picar la carne en trocitos.  En este punto es cuando hemos de tomar el peso de la fruta que tenemos.  Suponiendo que tenemos un kilo de membrillo limpio, entonces corresponden 600 gramos de fructuosa, es el 60% del peso de la fruta. 

Poner la pulpa en una olla y la fructuosa, remover a fuego bajo hasta que se desintegre la fructuosa.  Entonces, se puede procesar con la mini pimmer o en una batidora y volver a la olla, a fuego bajo y cuidando de no quemarse con lo que salte de la olla.  Hay que remover frecuentemente para que no se queme la fruta en el fondo.  Mi dulce tardó una hora más o menos.  Y como se sabe cuando ya está? Pues, ponemos una cuchara de madera en el centro y si se mantiene y tarda mucho en caer, el punto ya está logrado.  

Entonces poner en los envases elegidos.  Yo históricamente siempre elijo el clásico "tupper" rectangular, apto para congelación y que soporte el calor.  Echamos la mezcla en el envase y luego esperar a que se enfrie.  Se puede mantener en el congelador para conservar más tiempo.  Si no, yo lo saco del molde cuando ya  está duro, luego lo rebozo por un poco más de fructuosa y lo envuelvo en plastico alimentario y a la despensa. 

Esta receta me alegra la vida, porque cuando la estoy preparando, mi casa huele delicioso y el perfume dura incluso algunos dias en el entorno.