Delicioso y sorprendente! Sorprendente porque fue una receta que no hice muy convencida y ha terminado siendo un exito! El resultado es un bizcocho muy esponjoso, que se puede comer como está o acompañar con alguna mermelada a la fructuosa. Una nota para los "dulceros": a mi no me gustan las cosas demasiado dulces, por lo que he puesto una cantidad inferior de fructuosa a la receta. Si te gusta más dulce, convendría ponerle unas 5 cucharadas.
180 gramos de harina de arroz basmati integral, 90 gramos de harina integral, 100 gramos de harina de almendras, 3 cucharadas de fructuosa, 1 cucharadita de bicarbonato, 1 yogur natural, 30 gramos de aceite de colza, 500 gramos de calabacín, esencia de vainilla y jingibre rallado, nueces picadas
Mezclar harinas, polvo de almendras y bicarbonato. Aparte, batir el
yogur con el aceite y la esencia de vainilla y agregar a la mezcla de
harinas. Pelar los calabacines y rallar en los agujeros más finos y
agregar a lo anterior y mezclar. Volcar en un molde con papel de horno,
espolvorear por encima con nueces picadas y hornear durante 40 minutos a
180º
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