Es que hoy es el cumpleaños de alguien muy, muy especial en mi vida.
Hoy, hace 15 años, llegó al mundo un hombrecito, muy esperado, y quien fue mi primer bebé en esta vida: mi hermano Santino.
Yo tenía ya 21 años cuando supe que pronto vendrías... y fuiste como mi primer hijo, mi bebé, mi chiquitín... Desde el primer momento, super que ibas a ser un varón, y de Boca, por supuesto.
Estuve esos meses insistiendo e insistiendo para llamarte Santino y al final... lo logré.
Llegaste en un momento en que todos te necesitabamos, fuiste como la calma que llega después de la tempestad. Y en un alarde de tranquilidad nunca visto en mi, me puse a bordarte con tus iniciales toda tu ropa, los baberos, las batitas, las sábanas de tu cuna y tu moises...
Llegaste un día de mucho frío, y fui la primera persona que te tuvo en brazos, ya que no dejé ni siquiera que te subieran a la habitación, sino que me metí en el ascensor y te agarré a los besos y los abrazos. Esa noche te tuve toda la noche en brazos, sentada en la silla del acompañante de la clínica. Ya tarde, abriste los ojos y me dedicaste una mirada ciega de recién nacido, pero yo supe que me sentias.
Mientras creías, faltó poco para que te echaras a perder a fuerza de los mimos y las mañas que te dabamos tus dos hermanas mayores.
Pero nunca has hecho más que enorgullecerme con tus actitudes y tu forma de ser. Tengo el orgullo de saber que te abrís paso en un mundo difícil, y una de los momentos más lindos de mi vida fue verte el pasado mes de mayo con tu sobrina en los brazos. Sos un niño tan bueno, tan honesto!!!
Recuerdo siempre aquel día de junio, cuando Alicia y yo te teníamos de la mano, ibamos caminando en la vereda de casa, el sol de aquel día frío, alto en el cielo, y de repente vos nos soltaste y empezaste a caminar solito.
Recuerdo cuando te sentabas junto a mi y te ponías a tocar tu guitarrita de juguete.
Deseo que sigas adelante a través de los años, tan honesto como hasta ahora.
Deseo que persigas tus sueños hasta encontrarlos.
Deseo verte patear la pelota en el club de tus sueños.
Pero sobre todo, deseo saberte FELIZ, que las tristezas no empañen tus ojitos, esos tan bonitos con los que me miraste hace ya 15 años, por primera vez.
Ya no te sostengo de la manito, y la distancia me impide caminar a tu lado, pero debés saber que siempre estoy junto a vos.
Siempre te quiero.
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